“La repavimentación de la ruta 307 entre El Infiernillo y Amaicha nunca se llegó ni siquiera a licitar porque nunca contamos con los fondos ni la financiación para hacerla. Estaba en nuestros planes, pero no pudo concretarse”, admitió Raúl Basilio, ex administrador de Vialidad Provincial y actual asesor de la Unidad Ejecutora Provincial, dependiente del Ministerio de Economía de Tucumán.
En 2008, cuando comenzó la repavimentación de la ruta que conduce a los Valles había anunciado que esa obra se haría desde Acheral hasta el cruce de la ruta 307-357 con la 40, para poder llegar con fluidez a Quilmes y a Colalao del Valle. Sin embargo, el grifo de la repavimentación se cerró en El Infiernillo.
“De Tafí al Infiernillo la obra se hizo gracias a un convenio que se había firmado con Vialidad Nacional, para esa y varias otras rutas. El arreglo consistía en que Vialidad de la Provincia ponía la plata y Vialidad Nacional nos la devolvía a 30 o 45 días. Ese mecanismo funcionó durante un tiempo, pero los pagos empezaron a atrasarse y nos pareció una irresponsabilidad seguir contratando obras que no íbamos a poder costear. Por eso los tramos Infiernillo-Ampimpa y Ampimpa-Amaicha nunca se llegaron ni siquiera a licitar. Hicimos gestiones por distintas vías para conseguir financiamiento, pero no lo obtuvimos”, aseguró el ex administrador, quien dejó el cargo en noviembre de 2015, cuando asumió Ricardo Abad.
“En nuestra zona, por la distancia, el estado de la ruta es condicionante para muchas actividades. El problema más serio es el de la salud, los traslados en ambulancia son muy problemáticos y es una realidad diaria con la que nos enfrentamos. Nos queda más accesible llegar a Cafayate, por la distancia pero sobre todo por el estado del camino”, lamentó José Díaz, delegado comunal de Colalao del Valle. Además de los traslados de enfermos, la actividad productiva de la zona y el turismo también encuentran un freno importante por el estado de la ruta hasta El Infiernillo.
“Hace rato que venimos hablando con distintos funcionarios, con el Ministerio del Interior... la semana pasada nos visitó la ministra de Salud, Rossana Chahla, y ellos lo vivieron en carne propia porque llegaron por vía terrestre. Yo estoy desde 2011 en el cargo y siempre en cada reunión sobre turismo o lo que sea planteamos el tema de la ruta 307”, señaló el jefe comunal. “No sólo acá arriba, el tramo El Infiernillo-Tafí también está muy deteriorado y es un peligro porque ahí siempre está la nube y nos vivimos tragando los baches, agregó
Según Díaz es constante la queja de los turistas que se animan a llegar hasta Colalao del Valle por la ruta minada de baches, sin señalización de ningún tipo, sin banquina y tapizada de piedras sueltas a la orilla. “Quilmes, donde se está reflotando el proyecto de una hostería en la Ciudad Sagrada, Cóndor Huasi, El Pichao, Talapazo son todas localidades que intentan posicionarse turísticamente, pero la ruta tira para atrás. Es por eso que decidimos presentar la nota al Gobernador, firmada conjuntamente por los delegados comunales, intendentes y representantes de las comunidades indígenas. Veremos si hay respuesta”, señaló.
Díaz contó que al menos una vez a la semana viaja a la capital por trámites de la gestión y que ya han optado por hacerlo en el colectivo, por seguridad. Ahora están embarcados en la organización de la Fiesta Provincial del Antigal, en enero, que siempre es muy concurrida, aunque sabe que podría serlo mucho más con una buena conectividad.